En un mundo donde parece que los valores se han perdido, donde decimos que los jóvenes no se comprometen, no tienen constancia y tantas otras cosas, esta jugada nos demostraba una vez más, que ¡¡¡hay un nuevo mundo naciendo!!! Un mundo más complejo, que tenemos que salir a crear y descubrir… y los jóvenes lo están haciendo, pero los adultos vemos ese cambio como una rebelión al orden que nosotros aprendimos y que nos dedicamos a construir sin cuestionar.
Y acá estábamos con este grupo, que perfectamente podrían haber sido nuestros hijos, exitosos, padres, totalmente compenetrados jugando con valores y emociones, pero especialmente compenetrados por encontrar un diagrama lógico que les permitía autoevaluarse, relacionarse con sus pares y proyectarse hacia el futuro.
“Conciliar lucro y ética. ¡Ese es el debate que me gustaría tener!”. “Me gusta estar repasando si soy fiel a mis valores”. “Está bueno ver como mi socio me complementa”. “Durante el intervalo me di cuenta de que no los estoy escuchando…” Y al final del juego “¿Ahora podemos hacer preguntas nosotros? ¿Los adultos se prenden en estas cosas?”… Ese fue el mejor momento de la noche. Jóvenes y exitosos, pero hijos de una generación responsable del presente. ¿Qué valores nos trajeron hasta acá? Y ahí reabrimos la reflexión: es tiempo de nacimientos, y un nacimiento no es un proceso prolijo y sin desgarros…lo bueno es darnos cuenta que al final de cuentas la vida es aprendizaje continuo para nosotros y para nuestra especie como jugadora del ecosistema planetario, y ese aprendizaje se transmite en las conversaciones y momentos de valor que construimos juntos, no sólo con pares, sino especialmente entre generaciones, entre diferentes.
Es tiempo de sentarnos a conversar, abriendo el corazón, con un mapa de viaje que nos ayude a soñar juntos por la sustentabilidad de nuestra especie en el planeta, con el planeta… eso es ValueGames. Cada jugada un sueño que nace en nuestro interior.