El Corazón Luminoso de la Humanidad


Corazón Abierto: En el Corazón se encuentra el amor genuino, que oficia de puente entre nuestro instinto de supervivencia y nuestro altruismo. Siente la plenitud y el crecimiento personal al expresar tu verdad. Que cada carta que juegues sea una expresión de amor, tanto para ti como para los demás, creando conexiones auténticas en cada juego.


Adentrémonos en el cuarto centro de energía humano, un santuario especial donde dejamos atrás el egoísmo para abrazar el altruismo. Este centro, asociado con el plexo cardíaco, nos conecta con las emociones más nobles y elevadas: el amor, los cuidados, la compasión, la gratitud, la bondad y la generosidad. Aquí, en el corazón luminoso de la humanidad, hallamos la sede misma de nuestra divinidad, el hogar del alma.

Mientras los primeros tres centros se ocupan de aspectos relacionados con la supervivencia, este cuarto centro nos eleva a un plano superior. Cuando está en equilibrio, experimentamos un amor genuino por la vida y nos sentimos plenos al ser quienes somos. Es el lugar donde florecen la integridad y la confianza, y donde nos convertimos en seres dispuestos a cooperar por el bien común.

Este centro nos enseña a ir más allá de nosotros mismos, a cuidar de los demás y a honrar la esencia de nuestra especie. Es el faro que ilumina el camino hacia el desarrollo personal, inspirándonos con la valentía y el sentido de aventura necesarios para evolucionar y contribuir al bienestar de aquellos que nos rodean.

Nombrémoslo con sencillez como «El Corazón Luminoso de la Humanidad». En su equilibrio, este centro nos invita a trascender nuestras necesidades individuales para abrazar un amor más grande, construyendo un mundo donde la compasión y la generosidad son la base de nuestras interacciones.

¿Cuántas veces al día mirás a la vida desde el corazón? ¿Si el corazón es el puente entre el egoísmo y el altruismo, hacia dónde solés cruzarlo más seguido?